sábado, 23 de octubre de 2010

HISTORIA DE AURORA

Llevo 20 años esperando el momento de salir de este frío, sólo con el deseo de volver a ver a Lorenzo y a Blanca… me he mantenido viva por el recuerdo del calor de su amor y el deseo de estar a su lado de nuevo…
Soy Aurora Ponce de León y estoy aquí para contarte mi historia… Siento el frío de esta cápsula que me mantiene viva sólo por el deseo de regresar a mi vida y buscar de nuevo al hombre que me enseñó a amar años atrás. A mis 20 años me enamoré por primera vez de Lorenzo, un hombre que me volvió loca con sus ojos, su carisma y una forma de bailar que deja sin palabras a cualquiera. Era profesor de baile y lo conocí cuando era padre soltero de Martín, a quien su mamá abandonó y lo dejó a su cargo. 

Nuestro amor fue intenso y verdadero y fruto de esa relación, quedé embarazada… Pero mis padres jamás permitirían que me quedara a su lado, por que para ellos él era de una clase social diferente a la mía. Para alejarnos, me enviaron a otro lugar a tener a mi hijo y nunca me dieron la oportunidad de contarle que sería papá de nuevo. 

Lorenzo estaba seguro de que lo había abandonado, pero el destino se encargó de cambiar el rumbo de mi historia, cuando llegó una terrible noticia que cambiaría mi vida y la de mi familia para siempre. Luego del nacimiento de mi hija Blanca, me descubren una enfermedad incurable, y al borde de la muerte, mi papá usa la criogénica para mantener la esperanza de salvarme.

Mi papá es médico y reconocido por ser un experto en el campo de la criogénica, una ciencia donde congelan cuerpos para la preservación… Por eso decide congelarme con la esperanza de que más adelante alguien encuentre una cura para mi enfermedad. Ya han pasado 20 años y aún sigo aquí… esperando despertar de este sueño eterno. Ya la cura existe y mi papá me regresará a la vida, pero tengo que llegar a recuperar a una hija que no me conoce y volver a los brazos del hombre que amo…

Yo me siento débil pero me veo igual que cuando entré en este viaje… no sé cuanto ha cambiado todo afuera, no sé como vivir en un mundo distinto después de tanto tiempo: mi hija debe tiene casi mi edad, mis padres se ven cansados, y Lorenzo… Lorenzo me habrá esperado como yo a él?…
El calor del amor es lo único que me mantiene viva entre tanto frío y la esperanza de vivir un amor del pasado en el presente.